En las ultimas dos semanas he pasado por innumerables estados de ánimo. He pasado de la alegría a la pena, de la esperanza a la desconfianza, de la confianza a la incertidumbre. A veces en minutos, a veces en días y a veces en semanas.
Luego de haber terminado con mi novia de casi siete años empecé a conocer a una chica. Algo de ella me atrapó de la noche a la mañana. Quise conocerla más, saber que pensaba, que hacia, que le gustaba, entre otras cosas. Fue así como moví los hilos para que las cosas resultaran tal como yo esperaba. El que se crearan las situaciones para futuros encuentros y ver de esa manera si resultaba o no algo de ello.
Creo que al principio resulto todo ok. Al parecer la atracción era reciproca y como todo en un principio uno comienza hablando de "gustar" al otro. Según ella le gustaba pero con miedo. El miedo de que le llegase a gustar tanto que si la cosa no resultase sufriría mucho por ello. La entendí completamente.
Yo por mi parte nunca pienso mucho en el futuro en cuanto a relaciones. Voy avanzando de acuerdo a como se van dando las cosas no adelantándome ni pensando en que vaya o no a sufrir por ello, para mi las relaciones son procesos de inicio, desarrollo y final, con cada una de estas partes con ricos momentos que deben ser disfrutados como también malos que deben ser mejorados. Pero bueno, ese no es el caso.
El asunto es que algo en el proceso cambio. Yo, no buscando una relación, me empecé a involucrar mucho sentimentalmente con esta persona. Me gustaba mucho y pensaba más de lo normal en ella. Sentía que algo pasaba y por ende la buscaba. Pero nunca lo sentí de la misma forma al otro lado.
Varias cosas sucedieron en ella. Terminó definitivamente toda relación con su ex y al parecer eso la dejó mal. La dejo en un estado de mucha nostalgia y pena el cual lo note desde un primer momento.
Tuvimos un viaje grupal, algo que prometía mucha buena onda. Mis amigos, sus amigos, todos reunidos en un mismo lugar y quizás en la ciudad mas maravillosa de Chile: Valparaiso.
Todo iba excelente lo pasábamos muy bien, lo pasábamos excelente mientras había música, alcohol, fiesta.
Todo bien hasta que llegaba la mañana.
Todo era distinto al otro día. Era persona diferente, apática, que esquivaba miradas. Que solo se relacionaba con amigos y no con quien había pasado la noche.
Eso me hizo sentir mal. Muy mal. No por ese hecho, si no porque no sabia que pasaba. Es lo peor. No saber que pasa o que sucedió. Simplemente actuando de manera extraña y sin explicaciones. Para mas remate al parecer no es una persona que te diga que le pasa. Ni tampoco pareciera ser de las que arregla las cosas conversando. Mas me da la impresión que deja que las cosas queden ahí hasta que llegue su fecha de vencimiento.
La verdad es que el tema da para mucho. Sobre todo de una persona que nunca ha sido capaz de decirme que es lo que le pasa en realidad. Cosas que pasan y que no podemos controlar cuando nos gusta una persona.
Hoy quiero cerrar este capítulo. Ella aun no esta preparada para dejar a su ex y yo quizás necesite estar solo para reencontrarme conmigo mismo luego de una relación tan larga como la que tuve. Somos increiblemente distintos en muchos aspectos y si bien eso nunca ha sido problema para mi, al parecer esta vez pesará por las circunstancias que vivimos en realidad.
Hoy doy el paso al lado y disculpa si me adelante a verte antes de que terminases de pensar, pero necesitaba una respuesta (la cual solo tuve a migajas) pero con ello me queda claro que fui un niño que se embaló demasiado quizás con alguien que no estaba preparada. Mucha suerte y ojalá encuentres a aquella persona que te ayude a olvidar a esa persona por la que lloras aun en los rincones mas oscuros de B*
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